El amor es una de las palabras más extensas e indescifrables que existe en el mundo, ya que el significado de esta corta pero compleja unión de letras es totalmente subjetiva, adaptándose a las necesidades de cada persona y su manera especial de sentir afecto.
Para darnos algunas pautas y entender cómo expresar amor hacia otra persona, el escritor Gary Chapman plasmó en su libro Los 5 lenguajes del amor lo siguiente: cada persona tiene entre uno o dos tipos de lenguaje con los que se siente más cómodo para expresarse y con los que capta mejor el amor que viene de otros. El texto nos brinda 5 maneras diferentes en las que el ser humano puede recibir este bonito sentimiento y sentirse completamente amado; y es así como entendemos que no es solo decir te amo, sin implicar ninguna evidencia que sustenten esta confesión, ya que aunque hablemos el mismo idioma, la otra persona no se sentirá plenamente confiada o quizás sienta que le estás diciendo en un idioma diferente, simple y sencillamente porque no encontramos el lenguaje secreto que nos de la entrada a su corazón. Conocer cuál de estos lenguajes encaja con nosotros, nos permitirá entendernos mucho mejor a nosotros mismos; solo así sabremos de qué manera amamos, cómo esperamos que el otro lo haga, y de qué forma podemos llegar a un equilibrio perfecto en la relación.
Muchas veces descubrir qué tipo de lenguaje de amor hablan las personas a nuestro alrededor es un largo y confuso camino que nos puede llevar a la decepción o a darnos por vencidos, puede hacernos sentir rechazados o heridos porque pensamos que nuestros esfuerzos por amar no son tomados en cuenta, y luego de agotar todos los recursos y querer cerrar las puertas de las posibilidades, es donde debemos comprender que estábamos demostrando nuestro lenguaje sin considerar qué idioma del amor hablan nuestros seres queridos, porque el amor tiene diferentes formas, maneras singulares e idiomas propios que son necesarios entender para darle estructura a este sentimiento que está lleno de maravillosos matices.
Se nos pasan las horas y días tratando de entender el amor que podemos ofrecer a nuestra pareja, familia y amigos, porque es parte de nuestra naturaleza humana, dar amor y recibir amor, es esta la complejidad de la humanidad porque amamos a quien nos ama, pero resulta difícil amar a quién nos hiere, siendo este el mayor ejemplo de amor que Jesús nos dejó en su paso por la tierra.
Y mientras nos preocupamos por hallar la forma de ser amado sin prejuicios, olvidamos que hay alguien que nos amó antes de conocernos, alguien que conoce nuestro lenguaje y nos habla directamente al corazón, aunque a veces no podamos identificar sus maneras porque estamos distraídos en cosas vanas, esta persona importante es Dios, que está esperando por ti, y con Él todo es tan simple porque no hace falta que estudies cuál es el lenguaje de su amor ya que Él tiene las 5 maneras, no importa de qué cómo le busques, Él recibirá el amor que viene de ti.
A continuación, te presento los 5 lenguajes de Dios con los que podrás acercarte más a su amor incondicional:
1. Palabras de afirmación
Cuando amamos a alguien es muy fácil repetirle a diario cuánto esta persona significa para nosotros, la relevancia de su presencia en nuestras vidas y no dudamos por un minuto decirles constantes te amo durante el día. Esto no es algo obligado sino más bien un acto que sale del corazón y que no nos avergüenza.
Con Dios sucede de la misma manera, si le amamos de todo corazón vamos a testificar de Él todos los días, vamos a hablar de sus maravillas, de lo grande que es, del cambio que ha hecho en nosotros y de cada bendición que ha derramado sobre nuestras vidas.
David era un salmista que entre sus escritos siempre hablaba de la grandeza y magnificencia de nuestro Señor, él estaba agradecido porque desde su juventud guio sus pasos y ahora David puede anunciar sus maravillas. Salmos 71:17.
2. Tiempo de calidad
Uno de los regalos más bellos que podemos ofrecerle a alguien, es nuestro tiempo, es el espacio que le damos a los que amamos para que se sientan escuchados y comprendidos. A veces este tiempo lo demostramos apagando nuestro celular, cancelando citas para pasar la tarde con esa persona especial, tomarse un fin de semana para disfrutar juntos, y un montón de actos que implican regalar nuestras horas de trabajo o estudio a alguien que queremos, y esto no significará un sacrificio en lo más mínimo porque el amor es tan grande que las manijas del reloj no toman relevancia entre ambos.
La única manera de conocer a alguien es pasando tiempo con esa persona sin hacer de este acto una obligación. De la misma manera conocemos a Dios cuando nos rendimos en oración, meditamos en su palabra y leemos la biblia. Ser cristiano no es solo ir a la iglesia y orar una vez al día como regla general, ser cristiano va más allá de estos actos básicos, implica dedicarle tiempo de calidad a quién nos ha amado tanto que pagó nuestras culpas y nos redimió para ser hijos suyos, esta clase de amor solo puede ser retribuido cuando todo nuestro tiempo le pertenece al creador del cielo y de la tierra, buscando primero su voluntad, entonces todas las cosas vendrán por añadidura. Mateo 6:33
3. Regalos
Creo que todos nos sentimos contentos cuando recibimos un regalo de quien amamos, pero quienes poseen este lenguaje, es una manera de sentirse amados, porque la otra persona se tomó de su tiempo y de sus recursos para comprar algo que sería agradable, y durante esos minutos estuvo presente en sus pensamientos tratando de averiguar cuál sería el mejor regalo, evaluando sus gustos y preferencias.
Nacimos con sueños y anhelos, tenemos deseos en nuestro corazón que alguna vez nos gustaría cumplir, para hacerlo nos trazamos planes que nos ayuden a conseguir lo que un día nos imaginamos. Cuando se trata de planes personales, el ser humano suele ser egoísta porque quiere lograrlo solo, quiere sentirse victorioso y decir satisfactoriamente lo logré, y felizmente celebrar sus triunfos, pero ¿qué sucede cuando Dios nos dice que pongamos nuestro futuro en sus manos, que Él cumplirá todo en su tiempo? Puede resultar difícil porque las dudas rondan nuestra cabeza y creemos que Dios no se acuerda de nosotros. Pero no es así, Él concederá cada cosa que anhelamos en su debido tiempo conforme lo ha estipulado, no dejará ningún detalle y nos hará felices. Dejar nuestros planes en manos del Señor es el mejor regalo que podemos darle, porque demuestra nuestra obediencia. Salmos 9:10
4. Actos de servicio
Hay quienes consideran que una acción vale más que mil palabras y este es de lenguaje de amor que describe aquella frase. Este grupo de personas se sienten amados cuando alguien realiza algo significativo por ellos, por ejemplo: lavar los platos de la cena, ayudarte con la tarea, ir por ti al trabajo, preparar tu bebida preferida entre otros, estos actos son representativos e importantes, porque así esta persona puede aceptar el amor que alguien le está ofreciendo.
Estos actos de servicio pueden resultar algo insignificante para quien no posee este lenguaje de amor, pero toma total importancia para quien lo tiene desarrollado. Así sucede con Dios, podemos demostrar que le amamos, sirviendo fielmente en su reino con el don que Él ha puesto en nosotros, no importa qué tan grande o tan pequeño pensemos que sea el don que nos fue asignado, mientras lo pongamos para el servicio del reino de Dios estaremos siendo de bendición para alguien más, para que algún día cuando estemos en su presencia nos diga: ¡Hiciste bien, siervo bueno y fiel! Mateo 25:21
5. Contacto físico
Un abrazo es la unión de dos corazones y a veces éste dice más que un te quiero, estoy contigo, comparto tu dolor o tu felicidad, me encantó verte, etc. El contacto físico es como una recarga de energía para los dueños de este lenguaje de amor, ellos se sienten queridos cuando alguien les toma de la mano o les da un abrazo, porque quieren sentir a esa persona cerca, saber que pueden compartir un sentimiento y que a través de su mirada pueden expresar el amor.
Uno de los mandamientos que están escritos en la biblia es amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos, algo que quizás resulta fácil hacerlo cuando alguien nos ama de regreso, pero es casi imposible cuando alguien no nos ama como queremos, pero es ahí donde demostramos el amor de Dios en nosotros, amando a quién alguna vez nos hirió, amando a quien es escéptico y distante con nosotros, porque la biblia nos dice que el amor cubre multitud de faltas.
Dios habita en pieles, si quieres sentir su contacto abraza a tu hermano en Cristo o dale la mano, así estarás sintiendo a Dios en piel a través de tu prójimo. Ezequiel 37:8
Mientras los seres humanos tenemos diferentes y complejas formas de amar y ser amados, Dios tiene muchas más que se pueden resumir en estas cinco. No dudes en acercarte a Él y decirle que le amas, estará dispuesto a aceptar la manera que le ofrezcas porque su amor hacia ti es infinito.
Dios te bendiga.
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